- Té no fermentado: Té verde. Para quien quiera refrescar la mente y continuar el día con vigor.
- Té levemente fermentado: El té blanco. Un elixir de suave sabor que retarda el envejecimiento.
- Té semifermentado: Té Wulong, sobrio y elegante, un sabor inolvidable.
- Té fermentado: Té rojo. Dulce sabor y aroma acaramelado que serena.
- Té Pu-erh: Llamado té negro en China. Es digestivo, contribuye a reducir el nivel de colesterol y contenido graso en sangre. Un buen complemento para quienes deseen bajar de peso.
- Personalizados: Tés con aditivos, sean Blends o tés aromatizados. Se ofrece una gran variedad, frutales, florales(ej. jazmín), etc.
En el momento de elegir un té, tu cuerpo es quien te dice cual es el más adecuado para ti. Hemos aquí algunos conceptos para aplicar:
- Degustar las distintas clases de té: puede tomar como referencia las clases de té ya mencionadas arriba.
- Encontrar el sabor: ¿Puro o con aditivos? Ej. Rojo puro, verde puro, rojo con durazno, verde con jazmín, etc.
- Según el momento del día:
- Por la mañana, para efectos depurativos, se sugiere un té negro en ayunas.
- Para un efecto energizante, té verde es el ideal.
- Para un momento de relax, el té rojo ayuda a la relajación, recomendado para la tarde o la noche.
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